Cariño, estoy tan feliz de haber confesado nuestro amor.
Al fin hemos conseguido echar a papá de nuestra habitación. Al casarme con tu padre, prometí cuidarte.
Y en apenas unos días, me di cuenta de que ibas a ser la persona más importante de mi vida. Te amo. Tu padre tendrá que aceptarlo y resignarse a ser un cornudo en su propia casa